A San Lorenzo le siguen cayendo inhibiciones producto de los despropósitos de la Comisión Directiva que manejó el club hasta fines del año pasado.
Esta vez el pedido llegó del Ferencváros de Hungría, equipo al que no se le pagó por la llegada de Carlos Auzqui al club. Es decir que además de la innecesaria llegada de un jugador que participó de 5 partidos y que no aportó absolutamente nada, a San Lorenzo le queda el clavo que dejaron por no haberlo pagado.
Pero esta no sería la única inhibición. Siguen todavía los problemas con Monterrey, equipo al que le quedaron debiendo plata por el pase de Bareiro.
Y como si esto fuera poco está a punto de caerse el acuerdo de pago a los Xolos de Tijuana por Diego "Torito" Rodríguez.
Entre las tres inhibiciones sumarían la cifra de 1.5 millones de dólares, un monto similar al que se tuvo que pagar al principio del año a Jason Gordillo, para poder realizar incorporaciiones.
A medida que pasan los días, continúan apareciendo sorpresas de ex jugadores y de clubes que reclaman que San Lorenzo no les pagó, a pesar que que, como dijimos, la anterior directiva decía haber acomodado los números con un manejo austero.
